Caminando en la oscuridad... [Libre]

Las luces se desplazaron desde la palma de Hizumi hasta la espalda espalda del chico, poco a poco se fue regenerando aquello que fue quitado casi como si fuese una herida normal pero con la gran diferencia que curar una herida normal no debilitaba tanto porque consumia menos energia, por fin cuando hubo terminado alejo su mano de la espalda del menor dando por terminado el trabamiento pero aun si saber que resultados habia obtenido.

Se acerco al rostro del muchacho observando claramente el cambio que este tenia.
- ¿como te sientes? -pregunto con una sonrisa, no sabia si todo aquello habia resultado bien o mal y se habia olvidado el hecho que acababa de usar sus poderes frente a un humano, lo unico que le preocupaba era como se encontraba el menor.

Sonrio al ver sonreir al menos casi le parecia increible que todo hubiese salido bien, pero el entusiasmo del chico le indicaba habia logrado si objetivo.

- de nada, me alegro que ya te sientas mejor- sonrio y se percato de que aunque el menor al parecer no habia podido ver aquellas estelas de luz podia preguntar lo ocurrido ¿acaso seria capaz de decir una mentira creible? no estaba seguro, pero no queria intentarlo, habia llegado a un punto en que las mentiras le cansaban a pesar que saber que decir la verdad le traeria problemas.

- estara bien en cuanto no vuelvas a ese lago- sentencio con un tono serio que a pesar de ser un consejo mas sonaba a orden.

- debo irme, tengo que alistar mi material para mi clase- mintio queria salir de alli antes de ser abordado con preguntas que serian dificiles de responder.

Miro con sorpresa al cuando el menor dijo que sabia que las luces no eran normales, quedándose por unos momentos sin saber como reaccionar para luego tomar una postura seria.

- entonces ya imaginaras que no soy normal…que no soy humano…soy un hibrido de ángel y demonio…- confeso desviando la mirada, mas de una vez había ocurrido, ayudar a alguien y que ese alguien saliera huyendo al saber lo que era. No lo miro porque no quería ver la expresión de terror de su rostro…mas de una vez la había visto y aun así no podía dejar de sentir congoja ante aquello y odiar ser diferente en ese momento.

Tuvo una expresión de sorpresa ante la expresión del menor, lo que menos hubiese imaginado era la emoción que mostraría el menor al respecto con lo cual no pudo mas que avergonzarse. Se avergonzó aun mas cuando hablo de sus ojos, jamás le había parecido bonito sus ojos a pesar de que su ex pareja le repetía con frecuencia palabras similares a las dichas por el menor.

Río un poco con lo de la tortura, ya más tranquilo sabiendo que no tenia que mentir ni fingir nada frente al menor.

- esta bien ya se que no dirás nada pero a cambio…hay algo sobre mi que debes preguntar- ofreció amablemente comprendiendo que el conocer a alguien como el podía causar curiosidad a cualquier humano.

Sonrio ante la pregunta, era natural aquella curiosidad del menor el tambien en el tiempo que se creia humano habria tenido curiosidad por los seres sobrenaturales, aquellos seres de los que mayoria de humanos conoce solo a travez de cuentos.

- mi madre era un angel y mi padre un demonio aunque nunca conocia a mi padre...y sobre lo de volar si tengo alas pero no son exactamente como las de un angel, despues de todo no 100% angel- sonrio respondiendo amablemente y al terminar de hablar dedico una mirada a los alrededores para saber si habia alguien cerca pero no encontro a nadie.

- no hay gente, asi que creo que puedes verlas por ti mismo- dijo y casi inmediatamente un ala de un color blanco brillante se dejo ver el lado derecho de su espalda mientras otra de un color negro hizo lo mismo en el lado derecho.

No pudo evitar sonrojarse un poco ante la emoción del menor, aunque el realidad le era difícil creer que sus alas eran bonitas por mucho que el chico lo dijera para el era algo normal sus alas, no bellas como las de un ángel pero tampoco feas simplemente nada extraordinario solo parte de el.

Escondió sus alas después de un momento conciente de que podría aparecer alguien y no seria conveniente que las vea.
-no se si sean bonitas pero al menos son útiles aunque sea algo molesto tener que esconderlas- dijo dando menos importancia a aquel a la belleza de sus alas sino a la utilidad de ellas que era para el lo que realmente importaba.

- sabes creo que deberíamos volver al colegio es un poco tarde y como tu profesor no puedo dejar que incumplas las reglas – le dijo con una sonrisa, si bien le correspondia un castigo al menor, por esta vez lo dejaría pasar.